23 de septiembre de 2018.
Artículo del Presidente de CEA publicado en el diario LA RAZÓN.
El Brexit replantea la necesidad de que el Campo de Gibraltar en general, y la Línea de la Concepción en particular, tengan una atención y consideración especial por parte de las administraciones en cuanto coexisten diferencias de renta profundas y con ellas, situaciones de desigualdad social relevantes. Hablamos de una renta per cápita muy alta coexistiendo en un territorio tradicionalmente castigado, que tiene una tasa de paro del 42 por ciento y una serie de problemas suficientemente conocidos, agravados, además, en los últimos meses como hemos podido ver.
Es aquí, donde la libre circulación de personas y mercancías quedará en suspenso a partir del 30 de marzo del año próximo si no se alcanzan acuerdos al respecto que despejen las incertidumbres creadas.
Dichos acuerdos deberían resolver, en primer lugar, el paso de personas y mercancías buscando la colaboración y cooperación para mitigar las consecuencias de una decisión política británica en la que empresas y trabajadores españoles se verían directamente afectados.
Y con tales acuerdos, en segundo lugar, la aprobación de un régimen económico y fiscal especial para la zona y, concretamente para La Línea, que facilite y reimpulse la actividad económica y empresarial de la zona, así como planes especiales que reflejen esta atención especial y urgente que necesita el Campo de Gibraltar. Se trata de resolver la incertidumbre y defender los intereses de las empresas y los trabajadores españoles, que son los intereses de España.
Javier González de Lara, Presidente de CEA.