Aumentan las personas desplazadas vulnerables

Más de 24.000 personas se han visto obligadas a huir de conflictos en la República Democrática del Congo; La OMS advierte que los países han de reforzar la prevención de muertes por enfermedades crónicas; La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos solicita 95 millones de dólares para luchar contra la COVID-19; Las langostas del desierto amenazan la seguridad alimentaria en cuatro países africanos

Más de 24.000 personas huyen de conflictos en la República Democrática del Congo

La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) advirtió este viernes que el recrudecimiento de la violencia y la reanudación de las tensiones en la región del Gran Kasai de la República Democrática del Congo podrían desencadenar en otra ola de desplazamientos masivos en el país si la situación no mejora.

Pese a un reciente periodo de calma durante el último mes, más de 24.000 personas han huido de tres conflictos distintos relacionados con disputas de tierras, enfrentamientos por los recursos y entre diferentes grupos étnicos, autoridades y milicias.

La mayoría de los desplazados buscan refugio en las zonas fronterizas provinciales de la región de Demba, en la provincia de Kasai Central, y en la región de Mweka, en la provincia de Kasai.

La violencia en la región de Kasai provocó durante 2017 el desplazamiento interno de 1,4 millones de personas dentro del país, mientras que unos 35.000 refugiados buscaron protección en Angola.

OMS
La falta de ejercio es una de las causas de la diabetes.

Los países han de reforzar la prevención de muertes por enfermedades crónicas

Muchos países se están quedando atrás en sus compromisos mundiales para abordar las muertes por enfermedades crónicas como la diabetes, el cáncer de pulmón y enfermedades cardíacas informó la Organización Mundial de la Salud este viernes.

Entre los países de ingresos altos, solo Dinamarca, Luxemburgo, Nueva Zelanda, Noruega, Singapur y Corea del Sur están en camino de cumplir la meta de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU que busca reducir en un tercio la mortalidad por enfermedades no transmisibles.

Según los expertos de la OMS, la relación entre la COVID-19 y este tipo de padecimientos destaca la necesidad urgente de que los gobiernos implementen políticas para prevenir muertes evitables por enfermedades crónicas.

Los accidentes cerebrovasculares, las enfermedades cardíacas y el cáncer de estómago han disminuido de manera constante durante la última década a nivel mundial pero las tasas de enfermedades como la diabetes, el cáncer de pulmón, el cáncer de colon y el cáncer de hígado están empeorando.

“Las enfermedades no transmisibles matan a más de 40 millones de personas al año en todo el mundo. Esto es 7 de cada 10 muertes a nivel mundial. Unos 17 millones de estas muertes son personas menores de 70 años, son muertes prematuras”, aseguró Bente Mikkelsen de la OMS durante una conferencia en Ginebra

UNRWA solicita 95 millones de dólares para luchar contra la COVID-19

La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) lanzó este viernes un llamamiento para recaudar 94,6 millones de dólares para continuar respondiendo a la emergencia sanitaria y socioeconómica creada por la pandemia de COVID-19.

El dinero se destinará a cubrir las necesidades de emergencia de 5,6 millones de refugiados palestinos registrados en el Oriente Medio hasta finales de diciembre con especial atención a la salud, la asistencia en efectivo y la educación.

En menos de 2 meses, entre julio y septiembre, el número de casos de COVID-19 pasó de 200 a casi 4000 en las comunidades de refugiados palestinos. Una de las principales razones es el impacto del bloqueo y los cierres en las economías domésticas.

La aportación es crucial para controlar la propagación de la pandemia en los campamentos de refugiados de Palestina y para ayudar a prevenir un brote importante.

Las langostas del desierto amenazan la seguridad alimentaria en 4 países africanos

Los brotes de langosta migratoria africana, una subespecie de langosta del desierto, amenazan la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia de millones de personas en Botswana, Namibia, Zambia y Zimbabwe, advirtió la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en el lanzamiento de un esfuerzo de respuesta de emergencia para controlar los enjambres.

Unos siete millones de personas en los cuatro países todavía se están recuperando de los efectos de la sequía de 2019, y actualmente se enfrentan a las repercusiones económicas de la pandemia de COVID-19. Estas personas podrían sufrir una mayor inseguridad alimentaria y nutricional.

Ante esta complicada situación, la Organización lanzó hoy el Proyecto de preparación y respuesta de emergencia contra la langosta en el Sur de África. El programa se centrará en la intervención de emergencia en los lugares donde haya concentración de langostas y reforzará la coordinación y el intercambio de información entre los países afectados.

También permitirá realizar actividades de vigilancia aérea y cartografía en zonas de difícil acceso y prestará apoyo técnico para el