22 de abril de 2019.
Artículo del Presidente de CEA publicado en Agenda de la Empresa número 244 (*)
CEA es la institución que representa a la Empresa en la sociedad andaluza. La organización empresarial más representativa de Andalucía. Y esta condición, conlleva un alto grado de responsabilidad en todos los ámbitos. En especial, en el de la transparencia, la participación y la gestión eficiente.
La representatividad de las empresas supone defender su papel y legítimos intereses y reivindicar su función social como creadoras de empleo y generadoras de progreso, con el que mejorar la vida de las personas y cohesionar la sociedad.
Decía Juan Ramón Jiménez, que un “estado permanente de transición, es la condición más noble del hombre”. Y sus palabras cobran actualmente un significado pleno. La transformación estructural y los cambios, cada vez más rápidos, nos impulsan a trabajar sin descanso desde CEA, para que el papel de la Empresa como clave de bóveda del ordenamiento social, sea más y mejor reconocido.
El Estatuto de Autonomía de Andalucía se refiere, en su artículo 157, a la libertad de empresa, a la promoción de la capacidad emprendedora y a las iniciativas empresariales que deben guiar la política económica andaluza. Éste es el gran objetivo que guía la acción de CEA: que los poderes públicos y la sociedad interioricen a la Empresa como el mejor medio de desarrollo y progreso, en el presente y hacia el futuro.
En este contexto, tenemos que agradecer al nuevo Gobierno andaluz, la elección de Hijos Predilectos de Andalucía el pasado 28 de febrero de dos empresarios ejemplares como son José Luis García Palacios, a título póstumo, y Francisco Martínez Cosentino.
De este último, quiero recordar estas palabras suyas pronunciadas en el brillante acto en el que se le distinguió: “La mayor prueba de amor que se puede tener por tu tierra, es invertir en ella”. Así es y más allá de cualquier otra consideración, permitidme que las haga nuestras como Organización empresarial: “El mayor compromiso que se puede tener por Andalucía, es promover la inversión y el empleo en ella”. Y yo añado: “No hay nada más útil socialmente que generar empleo. No hay nada más progresista que ser empresario”.
Más allá de cualquier otra consideración, esta elección de dos empresarios, ha supuesto un orgullo para la sociedad andaluza y una referencia ejemplar de la auténtica Marca Andalucía. Una Marca, que además de histórica, cultural y vital, es empresarial. Dentro y fuera de nuestras fronteras.
El día a día que se sucede trepidante y sin tregua, nos sorprende cuando se conforma en una historia de cuatro décadas con tanto peso institucional y social. Aspiramos a construir en ese día a día, el futuro que tenemos ante nosotros y que se presenta tan cambiante y disruptivo como el presente inmediato.
Seamos precisos y eficientes. Concretos y eficaces. Creativos e innovadores. Profundicemos en las ventajas de esta época transformadora con buenas actitudes y después con las herramientas, sean tecnológicas o de cualquier otra naturaleza.
Tengamos presente que las personas, hombres y mujeres, son lo más importante, quienes hacen Empresa, Organización y promueven el Empleo. Necesitamos generar un nuevo “Contrato Social” en el que la empresa se encuentre en el frontispicio de la acción política e institucional, como verdadero motor de progreso e impulsora de una visión más solidaria y humanística de nuestra sociedad.
Decía Pablo Picasso que “lleva tiempo llegar a ser joven”. Y es cierto: nos ha llevado 40 años, para llegar a seguir siendo jóvenes en la construcción de la Andalucía del futuro a la que todos aspiramos.
Javier González de Lara y Sarria.
*Extracto del discurso pronunciado el pasado 21 de marzo en el acto conmemorativo del 40 aniversario de CEA en Antequera.