¿Cómo protegerse de caídas en altura?

Sevilla, 9 de febrero de 2013. Fuente: www. preving.com

El riesgo de caída en altura es uno de los más peligrosos que podemos encontrarnos en un entorno laboral. En función de la altura desde la cual se produzca la caída, la lesión será más o menos grave, no siendo una garantía de levedad el que se produzca desde un nivel bajo. Podemos considerar que cualquier caída, incluso desde un par de escalones, puede tener consecuencias graves, en función de la parte del cuerpo que sufra los daños.

Por ello, es imprescindible planificar una adecuada protección frente a estas caídas en altura: en primer lugar, siguiendo los principios básicos de la Prevención de Riesgos Laborales, la primera actuación sería:

Evitar el riesgo de caída: limitando el acceso a zonas con este riesgo, instalando protecciones fijas y resistentes en las zonas peligrosas, etc.

Si el riesgo no es evitable, y es necesario asumir que estará presente, como puede ser el caso de trabajos en fachadas, terrazas, etc., será necesario evaluar el riesgo, valorando cómo puede afectar a la persona trabajadora, y proponer las medidas preventivas correspondientes:

algunas soluciones pasan por utilizar medios adecuados para trabajos temporales en altura, como plataformas elevadoras, andamios (con todos sus elementos de protección), y cualquier otro que garantice una adecuada protección frente a la caída.

Equipos de protección individual

En el resto de casos, donde no sea posible utilizar medios que garanticen un nivel de seguridad óptimo, se deberán emplear equipos de protección individual, siendo de dos tipos fundamentales:

  • Equipos que eviten que el trabajador acceda a la zona peligrosa, como un cinturón de seguridad anclado a un lugar adecuado, que evite la caída limitando el desplazamiento del trabajador, pudiendo también, para tal fin, usar arneses.
  • Equipos que no evitan la caída, pero que reducen las consecuencias de la misma, como son los arneses de seguridad de forma exclusiva, anclados a lugares específicamente diseñados. Su función es limitar los daños de una caída, una vez se produzca, aún pudiendo provocar daños leves en el cuerpo, por los efectos de la retención.

 

Incluso, en algunos equipos de trabajo en altura, como son las plataformas elevadoras, los fabricantes prescriben el uso de arneses anclados a dicha plataforma, o a lugares adecuados, para evitar la salida de la cesta o espacio de trabajo, por efecto de un movimiento pendular de la misma, o cualquier alteración de su estabilidad.

Mención aparte merecen los medios empleados para trabajos en altura con personas colgadas, como son las cuerdas y arneses para trabajos verticales.

Asemejándose a medios de escalada, pero en operaciones de descenso (primero se anclan al lugar más elevado, y de ahí se va descendiendo), son tanto un equipo de trabajo, como un equipo de protección individual. Especial importancia tiene, en este caso, emplear siempre una o varias cuerdas de seguridad, no debiendo usarse las cuerdas de “cuelgue”, para el anclaje de los equipos de protección individual (arneses).

Las caídas en altura, son la causa más importante de los accidentes laborales graves. Además, en la actualidad muchos son los usuarios que están expuestos diariamente a trabajos en altura como son los trabajos verticales o en tejados. Para ello, es totalmente necesario el uso de equipos de protección para la Prevención de Riesgos de caídas y a la vez, minimizar el daño en caso de caída.