Para la Confederación es imprescindible poner en marcha en Andalucía políticas de reactivación económica y de impulso a la actividad productiva
La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, acompañada por el viceconsejero de Hacienda, José Luis Rocha Castilla, se han reunido hoy con una representación de la Confederación de Empresarios de Andalucía, encabezada por su presidente Javier González de Lara, para informarle sobre el proyecto de ley de Presupuesto de la Comunidad andaluza para el año 2015.
La CEA considera que los empresarios son plenamente conscientes de las dificultades que se habrán suscitado para elaborar un presupuesto con tantos frentes abiertos, y a la vez atender a la consecución nuestros compromisos europeos con el control del déficit y la deuda. Según palabras del presidente de la CEA, los empresarios compartimos esos compromisos y objetivos, pero entendemos que no existe una única forma de alcanzarlos, y ahora es imprescindible poner en marcha en Andalucía políticas de reactivación económica y de impulso a la actividad productiva.
Para la Confederación de Empresarios de Andalucía la prioridad para nuestra economía y para nuestra sociedad es recuperar el empleo, al que en estos momentos no puede acceder uno de cada tres andaluces. Invertir este drama dijo Javier González de Lara- solo puede ser posible por la reactivación de la actividad económica y del estímulo a la iniciativa privada.
Asimismo, la consejera de Hacienda ha podido escuchar de primera mano algunas de las preocupaciones e inquietudes de los empresarios andaluces en torno al proyecto de presupuesto que ha presentado en este acto y la política económica regional en general. Cuestiones que, una vez que la CEA haya podido analizar con mayor detalle y detenimiento, expondrá con mayor profundidad en sede parlamentaria.
Sin perjuicio de ello, la Confederación ha aprovechado esta presentación para avanzar algunas cuestiones que a los empresarios interesa del presupuesto anual de la Comunidad Autónoma. Un presupuesto que, a pesar de los recortes, deja en manos de la Junta de Andalucía más de 23.000 millones de euros para atender sus programas de gasto social y económico. Estamos pues, ante un instrumento de política económica con un alto potencial para el desarrollo de nuestra comunidad.
Apuesta por la política de fomento empresarial
Para la CEA, la primera institución de Andalucía es su administración pública, y su presupuesto debe ser fiel reflejo de lo que los empresarios esperan de ella: agilidad, eficiencia y sensibilidad hacia los intereses de los ciudadanos y las empresas de Andalucía. Por ello, a la organización empresarial andaluza le sigue preocupando que menos de 3.000 millones de euros (10% del presupuesto) se dediquen a los programas de gasto que más directamente y a corto plazo impulsan la actividad económica y apoyan a nuestros sectores productivos.
Para recuperar el esfuerzo inversor público andaluz primero hay que resolver el problema del ahorro público bruto; en valores negativos a partir de 2009. Es cierto que para el próximo ejercicio se prevé una vuelta a registros positivos de ahorro lo que valoramos como positivo-, pero este ahorro sólo permitirá responder por el 10% del esfuerzo inversor previsto, (en 2009, cerca del 70% de las operaciones de gasto de capital se sustentaba en el ahorro público bruto).
Presión fiscal excesiva sobre su actividad productiva y profesional
Para la CEA este presupuesto debería reorientarse bajo la consigna de que para salir de la crisis es preciso dotar adecuadamente y priorizar aquellas políticas de estímulo a la actividad productiva y a la empresa: políticas de oferta. E, igualmente, sería conveniente que nos replanteásemos con seriedad, dentro del necesario debate nacional sobre la financiación del Estado Autonómico, la fiscalidad propia sobre la actividad y el empleo en Andalucía.
Porque en Andalucía nos encontramos con sectores que sufren una presión fiscal excesiva sobre su actividad, y, a su vez, empresas familiares, empresarios, emprendedores y profesionales cualificados se plantean localizar sus actividades fuera de Andalucía por cuestiones meramente fiscales. Con ello, perdemos talento y perdemos recursos.
Rigor, eficiencia, diligencia y diálogo social en la ejecución del presupuesto
Finalmente, la CEA demanda que se ejecute con rigor lo presupuestado: tanto en los tiempos de tramitación y puesta en marcha de las medidas, al menor coste posible, como en los plazos de pago de las obligaciones. Entre la decisión y la puesta en marcha no puede haber una dilación de meses que acabe convirtiendo las medidas en ineficaces.
La organización empresarial andaluza ha pedido también diligencia y celeridad máxima en el pago que supone la culminación de una ejecución de un programa de gasto público. Y no solo de las nóminas vinculadas a los servicios públicos, sino también y especialmente los proveedores, los suministradores, los inversores, los conciertos, los convenios, y demás intervinientes.
La Confederación ha realizado una llamada de atención a los compromisos del diálogo social, pues el cumplimiento de los planes y programas concertados debe ser una prioridad para la Junta de Andalucía. En definitiva, la CEA considera que, desde el ahorro, la efectividad y la eficiencia en la actuación pública, el Presupuesto de Andalucía se debe poner al servicio de la dinamización de la economía y la mejora de la competitividad de nuestras empresas y profesionales.