Sevilla, 28 de abril de 2020. Fuente: www.europapress.es.
La Asociación Nacional de Entidades Preventivas Acreditadas (Anepa) y la Federación de Servicios de Prevención Ajenos (Aspa) han constatado la fortaleza de la prevención de riesgos laborales en España ante el coronavirus. Así lo han señalado en un comunicado con motivo del Día Internacional de la Salud y la Seguridad en el Trabajo, que se celebra el 28 de abril.
De hecho, han apuntado que durante la crisis provocada por la pandemia el modelo preventivo español ha demostrado muchas fortalezas, entre las que destacan el desarrollo de sistemas de información para la población trabajadora «en tiempo récord» y de forma coordinada con las autoridades sanitarias.
Además, ha puesto en valor que se ha realizado un seguimiento de los casos con contactos estrechos por asignación o que se han realizado recomendaciones específicas sobre el tratamiento de los riesgos del coronavirus con arreglo al protocolo y a la Ley de Prevención de riesgos laborales y su desarrollo normativo.
También ha valorado que se hayan implantado planes de contingencia para la continuidad en empresas protegidas por servicios de prevención o que se haya evaluado la salud de los trabajadores esenciales «en una época tan compleja como la crisis sanitaria mediante la realización de exámenes de salud dentro de la vigilancia, con especial atención a los trabajadores más vulnerables».
Aspa y Anepa han recordado que los servicios de prevención ajenos de riesgos laborales son entidades con una estructura «fuerte y consolidada, que realizan un asesoramiento especializado en más del 80% del tejido empresarial de España, y con una importante capacidad de adaptación a los diversos cambios que se produzcan en el entorno laboral».
Analizando los dos primeros meses del año, fuera del contexto del coronavirus, ambas organizaciones empresariales han afirmado que los accidentes con baja experimentaron una disminución del 3,7% y los accidentes sin baja del 7,7%.
Desde su punto de vista, «estos son los resultados de un sistema de prevención que se pone en ocasiones en tela de juicio con valoraciones subjetivas e ideológicas». «La Ley de Prevención tiene 25 años, pero es una de las que tiene un mayor desarrollo normativo y actualización desde que fue promulgada, con el consenso de todas las partes y como transposición de una directiva europea al marco normativo español», han apostillado.
Para ambas organizaciones, es necesario seguir adoptando la Ley para la llegada de nuevos retos en materia de prevención, como el que plantea el coronavirus, «en cuanto en dónde termina la salud pública y comienza la salud laboral, dos caras diferenciadas de una misma moneda».
Así, han señalado que este nuevo entorno tiene que resolverse desde el conocimiento científico y evitando «soflamas» ideológicas e intereses creados que carecen de ninguna base experiencial que permita concluir cuál es el modelo perfecto.
Por último, han dejado claro que los empresarios deben ser conscientes de que integrar la prevención implica comprometerse desde todos los estamentos de la empresa y que los sindicatos deben abandonar el discurso de confrontación entre empresarios y trabajadores e instrumentalizar la prevención como puerta de entrada en la pyme.