2 de febrero de 2021.
Valoración de CEA del paro registrado por el SEPE en enero de 2021.
La patronal andaluza recalca la función de los ERTE como amortiguadores de la crisis económica y social y pide, para una eficacia real del control de la pandemia, más vigilancia y homogeneidad en las normas.
Andalucía ha registrado el mayor aumento del paro en el último mes con 18.249 personas más sin empleo (+1,88%). Son, en total, 987.686 los desempleados en enero. Respecto al año pasado, nuestra Comunidad cuenta con 181.596 parados más, que representan una subida del 22,53%. Este aumento del desempleo es común en todos los sectores, excepto en la Construcción, -1.849 parados menos-, siendo Servicios el más golpeado por la crisis, como ocurre en el resto del país. Huelva es la única provincia andaluza en la que desciende el paro, con 2.193 desempleados menos gracias al sector Agrícola.
Resulta muy significativo el descenso de la contratación: en enero se firmaron en Andalucía 100.448 contratos menos que en el mismo mes de 2020; un 21,14% menos de contratos. En cuanto a los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), son 98.821 los trabajadores incluidos en un ERTE en el último día de enero. Supone un 3,7% menos que en diciembre; 3.802 trabajadores en ERTE menos.
Ante estos datos y ante el cese de la actividad no esencial en aquellos municipios que superan la tasa de mil contagios de coronavirus por cada cien mil habitantes, la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) destaca, una vez más, el efecto amortiguador de los ERTE como herramienta útil y necesaria para mitigar los daños de la crisis COVID19 en las empresas y los hogares andaluces.
La patronal andaluza subraya también la imprescindible implementación de medidas que acompañen el cierre de los negocios de actividad no esencial tales como el adelanto del toque de queda. CEA alerta sobre el riesgo de limitar la actividad empresarial, ceñida a controles antiCOVID, trasladándose los contactos a entornos domésticos y privados donde las precauciones ante el virus pueden relajarse. De ahí la insistencia de aumentar la vigilancia sobre el cumplimiento del actual toque de queda y resto de restricciones. Todo ello por el propósito común, de ciudadanos, Administración, instituciones y empresas, de un control efectivo de la pandemia que favorezca un clima de confianza para la sociedad y nuestra Economía.